Incubación y cría artificial en Pingüino Magallánico (Spheniscus magellanicus)

Durante el mes de septiembre, los pingüinos magallánicos (Spheniscus magellanicus), arriban a las costas de Argentina desde Tierra del Fuego hasta Chubut e Islas de la plataforma continental, para nidificar. Ponen 2 huevos con 3 a 4 días de diferencia uno del otro. La incubación dura 40 días y en el caso de nacer ambos pichones, en más del 60 % de los casos alimentan solo al primero, muriendo el segundo. Un porcentaje (10-15 %) de huevos se pierden por roturas debidas a defensa de los padres frente a pingüinos intrusos o directamente al robo por reproductores ajenos al nido, y a predadores. El propósito de este trabajo fue aumentar este índice de éxitos, eliminando las causas de muerte pre y post-natal. Los huevos fueron obtenidos en Península Valdés, de una colonia en declinación natural, de no más de treinta parejas. Para no afectar el desarrollo natural de la cría, se tomó un huevo, solamente de aquellos nidos que contenían dos. Fueron recolectados 17 huevos que se incubaron a 29,7 ºC y entre 76 a 82 % de humedad. Al nacer, los pichones fueron colocados en una unidad de cuidado intensivo. La alimentación artificial fue a base de filet de merluza desmenuzado y crema de leche entera, más de un concentrado proteico y un suplemento vitamínico mineral. El alimento fue suministrado por sondaje estomacal. La fertilidad de los huevos recolectados fue del 94,11 %. Sobre el total de los huevos incubados se produjeron nacimientos en el 82,35 % de los casos. La efectividad de la crianza, llegando con pichones saludables a los 30 días de nacidos resultó del 70 %. De acuerdo a los resultados obtenidos podemos afirmar que la incubación y cría artificial de pichones, aumenta sensiblemente los nacimientos y la obtención de pichones en buenas condiciones de salud, superando las observaciones obtenidas con incubación y cría naturales. Consideramos que la metodología utilizada promete ser un efectivo instrumento para aumentar poblaciones en declinación mediante futuras reintroducciones, como así también para elevar la disponibilidad de animales nacidos en cautiverio destinados a zoológicos e instituciones educativas, con un mínimo de impacto ambiental.